Los mejores destinos para la luna de miel
|El matrimonio exige demasiados preparativos: el vestido, la fiesta, el lugar donde se celebra, ambientación, música, invitados…, toda una serie de temas que terminan siendo frustrantes para la pareja. La mejor manera de descansar de toda esa gran carga de estrés, es un viaje, pues representa el destino, el primer viaje de dos personas que acaban de unir su futuro, ahí radica la importancia de la luna de miel. Pero, ¿qué lugar elegir?
Destinos ideales para la luna de miel
Una luna de miel tiene que ser romántica, un regalo mutuo bien merecido. Sin embargo para que ese viaje de después del matrimonio se convierta en una experiencia inolvidable, se debe planificar muy bien cada detalle; conocer qué complace al otro, elegir cuidadosamente el destino ajustado a la personalidad de ambos, saber dónde comprar, entre otros elementos a tener en cuenta.
Cada noción debe trabajarse con el fin de hacer que la pareja disfrute del viaje, además de divertirse, descansar y sobre todo, compartir momentos especiales que los unirán mucho más como marido y mujer.
Paraísos en el mundo hay muchos para escoger. Lugares encantadores para disfrutar en pareja, ideales para vivir momentos mágicos como de ensueño: islas tropicales, playas de mares turquesa y arenas blancas, vestigios poblados de antiguas civilizaciones, comarcas atrapadas en el tiempo, témpanos de hielo sobre montañas en los extremos del mundo, o simplemente ciudades y parques exóticos difíciles de ver una segunda vez; entonces, ¿qué elegir? A continuación se presentan los principales destinos lunas de miel.
Islas Maldivas, romántico y afrodisiaco
Las islas Maldivas son conocidas por su fauna marina. De hecho es el lugar de residencia del pez más grande del mundo, el tiburón ballena, un animal hermoso, pacífico y discreto. El paisaje es típico de ensueños: cabañas sobre un mar de tonos turquesa, cielos despejados, fina arena blanca, bebidas y alimentos exóticos.
La descripción literal del paraíso, ofrece además infinitas actividades acuáticas, y puestas de sol dignas de folletos. Este destino ideal para multiplicar el romance.
Grecia, playa y cultura
Sin importar en qué estación del año se viaje a Grecia, siempre habrá sol. Sus aguas cristalinas nunca dejan de ser cautivadoras, la temperatura es perfecta para salir a caminar, tomar el sol y realizar actividades en la playa.
También al ser la cuna de la civilización occidental, este país ofrece una inmersión completa a la historia, la cultura y mitología, conociendo de forma práctica al visitar lo que hoy queda de las antiguas construcciones, la acrópolis de Atenas, Peloponeso, Delfos, Olympia y demás.
Tanzania, aventura y deleite
El lugar predilecto para los amantes de la naturaleza y la aventura. Tanzania es el país que resume en su territorio todos los distintos escenarios del continente africano: montañas, cataratas, lagos, sabanas, selvas; siendo el ecosistema de los seis animales representativos del continente: el leopardo, el rinoceronte, el elefante, la cebra, el búfalo y, por supuesto, el león.
Participar en un safari por el Ngorongoro y el Serengueti es sentirse parte de un documental, es vivir una historia alucinante y propia de la pareja y sin duda una buena forma de comenzar el matrimonio. Este país es sinónimo de naturaleza salvaje, atardeceres anaranjados y playas rodeadas de corales.
Argentina, inspiración y libertad
Argentina es un país único, la diversidad de su territorio es difícil de ver en otro lugar. Sus montañas están decoradas de glaciares, los animales extravagantes se pasean por las praderas y recorrer la Patagonia es igual a respirar libertad.
Entre los lugares favoritos para los enamorados están las cataratas del Iguazú, una de las siete maravillas del mundo, el glaciar Perito Moreno, el canal de Beagle donde cientos de pingüinos, focas y petreles, le cantan al borde del hielo en el horizonte llamado Antártida. Además, en ningún lugar se baila mejor el tango.
Tailandia, lugares atrapados en el tiempo
Visitar Tailandia es como viajar a un sueño maravilloso. El país enamora con sus paisajes y mares de aguas cristalinas, ciudades erigidas entre montañas donde se confunde la naturaleza con las construcciones. Una vez dentro, ya no existe el reloj o las preocupaciones del mundo moderno.
Entre las actividades favoritas de los enamorados se encuentra visitar los templos escondidos en la selva o tomar el sol en las playas coloridas más vírgenes de Tailandia.