Lorca, pasión e historia acunadas por el Sol
Pasea por las calles de Lorca y descubrirás una pequeña ciudad con un corazón tan grande como el astro que le da su sobrenombre de “Ciudad del Sol”. Lorca es el ejemplo perfecto de ciudad tradicional, de pueblo que lucha por mantener vivas sus tradiciones de las que se siente orgulloso y que le valen también el reconocimiento de “Taller del Tiempo”, ya que si te adentras en sus lugares más característicos y en sus costumbres más castizas pensarás que el tiempo realmente se ha detenido allí.
Con su alcazaba como vigía desde el Cerro de los Enamorados, la Fortaleza del Sol, Lorca cuenta con numerosos puntos de visita obligada que parecen formar una red llena de historia e impresionantes monumentos. Desde su hermosa Plaza de España ya podrás contemplar su castillo, pero tampoco podrás dejar de pasear ni volver la vista hacia su imponente Colegiata de San Patricio, donde se han localizado recientemente importantes vestigios en sus cimientos. Desde ella, una amplia variedad de caminos tienes como posibilidad. Así pues, tomes por una u otra de sus estrechas vías, llegarás a cualquiera de sus emblemáticas zonas y, todas ellas, te conducirán a animadas áreas por las que encontrarás restos de su pasado heráldico reflejado en antiguas fachadas y espléndidos palacios maravillosamente conservados.
Sin embargo, lo que verdaderamente da renombre a la ciudad es su Semana Santa y no precisamente por su fervor religioso, sino más bien por la pasión diferente con la que los lorquinos viven esa época del año. Los entendidos denominan sus procesiones “desfiles bíblico-pasionales” y si un día te decides a participar de ellas como un vecino más, tendrás la oportunidad de ver cómo parece que las típicas representaciones religiosas cobran una nueva vida a través de la mezcla del sentimiento palpitante hacia las imágenes religiosas con las carreras de caballos, carrozas, el particular sonido de sus tambores, el bullicio y las auténticas obras de arte que recorren la avenida principal de Lorca, los espectaculares bordados que protagonizan la “carrera”. Pero si no coincide que estés por esas fechas por la zona, puedes aprovechar cualquier momento del año para acercarte hasta los museos de bordados de sus principales pasos procesionales, del Paso Blanco (MUBBLA) y el Paso Azul (MASS) o hasta las iglesias del resto de pasos, Encarnado (con su Museo de Bordados Paso Encarnado), Morado (con su Museo de Arte Sacro Nicolás Salzillo) o Negro, en las que el patrimonio se observa en cada rincón, plagadas de Bienes de Interés Cultural. Aunque son solo algunos de los museos de los que dispone, puesto que, por ejemplo, el Museo Arqueológico Municipal o la Casa Museo Palacio de Guevara, te ofrecen, además, un par de visitas de lo más interesantes, entre otras muchas.
Aunque el carácter vivo de la localidad no se desvanece una vez pasa ese tiempo, sino que a lo largo de todo el año, sus calles, como la Corredera o su ya citada avenida principal, la Avenida Juan Carlos I, en la que se ubica el hermoso Palacio Huerto Ruano, no te dejarán indiferente al pasar por ellas. Será el mismo caso para sus concurridas plazas, como la Plaza de Colón o la Plaza del Teatro Guerra, con un ambiente envidiable del que podrás contagiarte.
Lorca también es un punto estratégico por su cercanía al mar, una corta distancia que podrás recorrer y plantarte en la playa en apenas media hora, tanto si eliges las denominadas “Playas de Lorca”, como las de las próximas Mazarrón y Águilas, todas con el encanto mediterráneo de aguas cálidas y calmadas donde relajarte y disfrutar de la naturaleza. Además, no solo será el mar la opción que tengas extramuros, sino que las sierras que rodean Lorca son asimismo una joya para los apasionados de la montaña. Por esta razón, si quieres disfrutar de aire puro, poniéndote en contacto con alguna de las asociaciones senderistas de los alrededores, podrás descubrir una cara bastante desconocida de la zona.
En resumen, ya te interesen la cultura y la historia, la naturaleza más propia del Alto Guadalentín murciano, las tradiciones más peculiares o simplemente conocer una ciudad con carácter, Lorca será el lugar ideal para que anotes en tu lista de visitas obligatorias.
Fotografía © Luiyo
